La siguiente reseña sobre el capítulo 3 de Otonari no Tenshi-sama contiene spoilers, así que si no has visto el capítulo, te recomendamos que lo mires primero.
La serie Otonari no tenshi-Sama ha lanzado ya su episodio 3 que continua la historia de Amane Fujimiya y Mahiru Shiina (el ángel), el cual sugiere una etapa de enamoramiento entre estos dos estudiantes foráneos de la Preparatoria Seijo. La historia tuvo un buen inicio y buena crítica, por lo que nos disponemos a saber que nos ofreció la tercera entrega.

Fujimiya recibe la visita de su madre (Shihoko Fujimiya), pero no le causa nada de gracia esta aparición, incluso pretende que no sepa de lo que está sucediendo entre él y Shiina ocultándola en su cuarto, pero a pesar de sus esfuerzos la descubre asumiendo que es su novia y pidiendole a Fujimiya que le aclare el tipo de su relación. La emoción de su madre es tal que Amane decide correrla de su casa por temor a causarle molestias a Shiina.
Sin embargo, Shiina resalta el hecho de que Fujimiya usara su nombre de pila (en la sociedad japonesa se menciona el nombre de pila únicamente con personas con las que se posee una confianza estrecha), ya que nadie lo usa ni en su familia ni en la escuela. Shiina, por corresponderle, también se refiere a Fujimiya como Amane aunque quedan de acuerdo en que solo suceda así en lo secreto.

Al ver que Shiina queda de nuevo como primer lugar de la clase en el trimestre, Fujimiya decide reconocer a Shiina por su esfuerzo regalándole un pastel que ambos comparten y disfrutan juntos. Fujimiya intenta preparle unos huevos revueltos a a Shiina para responder con agradecimiento todo lo que Shiina ha hecho por él, pero el resultado es desastroso, a pesar de eso, Shiina aprecia su esfuerzo y acepta que no quiere que Fujimiya le deje de necesitar por lo que propone que mejor le ayude a preparar la comida.
Ante la insistencia de sus amigos Itsuki y Chitose, Fujimiya acepta recibirlos en su departamento en la noche de Navidad después de confesarles que ha estado viéndose con su vecina para comer sin aceptar que se estaba refiriendo a Shiina quien recibe bien la noticia porque ella no celebra nunca con nadie, pero Fujimiya decide pasarlo con ella después de estar con sus amigos. Ya en la celebración en el día de Nochebuena descubren que Shiina es la vecina de la que Fujimiya ha estado hablando.

La relación de Fujimiya y Shiina ha estado evolucionando bien para un enamoramiento aunque tienen una situación que desean evitar: Shiina no quiere perder su posición en la escuela aunque se atreve a darle la espalda a su solitaria forma de vivir conviviendo con Fujimiya y este, aunque no lo ha aceptado se siente bien y quiere conquistar al ángel. El descubrimiento de sus amigos sobre la enigmática mujer sugiere que finalmente hay un punto de giro en esta historia, y es que, a pesar de que representan naturalmente la historia del enamoramiento, es cierto que lo que se busca en las historias interpretadas (teatro, cine, telenovelas, etc.) es que los puntos de giro sean sumamente atractivos para la audiencia, en esta altura del anime, aún no nos queda claro cuál sería en esta serie.
Resulta de llamar la atención la relación pesada y tosca que lleva Fujimiya con su madre, y también la forma en la que diseñaron a este personaje, el cual carece notablemente de signos de vejez sumado a que disparó comentarios donde la propia audiencia está de acuerdo en el que dicho rol y personalidad es más propio de una hermana coincidiendo con el aspecto juvenil que tiene. Saca tus propias conclusiones.
Sinopsis de Otonari no Tenshi-sama:
Después de resfriarse al dar su único paraguas a una chica sentada bajo la lluvia, Amane Fujimiya sólo espera que ella se lo devuelva eventualmente. Sin embargo, Mahiru Shiina, el “Ángel” de la escuela de Amane y su vecina, le da mucho más que eso. En lugar de sólo el paraguas, insiste en devolverle el favor ayudándole a recuperarse de su resfriado. Sin embargo, ella es ajena al campo de batalla que es el apartamento de Amane.
La única palabra que Mahiru encuentra en su boca para describir el caos es “antiestético”. Pero a pesar de su antipática descripción, Mahiru procede a ayudar al desesperado Amane. Otonari no Tenshi-sama ni Itsunomanika Dame Ningen ni Sareteita Ken sigue a Amane mientras es atendido por Mahiru, que se ocupa de varias tareas, desde la limpieza de su apartamento hasta la preparación de la cena. ¿Hay algo que el ángel no pueda hacer?